El Riksdagen, el parlamento unicameral sueco, aprobó ayer por 198 votos contra 38 una ley que convierte a Suecia en el primer país del mundo que equipara a las parejas homosexuales y las heterosexuales en la adopción de hijos.
Cinco partidos -socialdemócratas, izquierda, verdes, centrista y liberales- aprobaron el derecho de las parejas homosexuales a solicitar la adopción de un hijo. El partido conservador votó a favor de la moción, pero se opuso a que se aplique a las adopciones internacionales.
La ley establece que las parejas homosexuales, las registradas
legalmente y aquéllas que conviven de hecho, pueden obtener la
custodia de un niño.
La ley entrará en vigor en el año 2003, cuando hayan expirado los
plazos legales para la renuncia sueca a la Convención Europea sobre
Adopciones.