El «Libro blanco alcohol y adolescencia», que ayer fue presentado por el director gerente de la Fundación Sociedad y Alcohol, Jaime Gil Robles, destaca también que un 40 por ciento de los jóvenes considera necesario el control paterno sobre este asunto. Según esta investigación, el 90 por ciento de los jóvenes españoles tiene sus primeros contactos con la bebida en el seno de su propia familia, «hecho que no supone un consumo habitual», explicó Gil Robles.
La edad media de comienzo en la ingesta de alcohol es de 14 años y la mayoría (un 23 por ciento) han utilizado la cerveza como bebida de inicio seguida del vino (un 19 por ciento), y los licores (un 19 por ciento). Respecto a los gastos, el presupuesto semanal destinado a alcohol es inferior a los 6 euros semanales en un 41 por ciento y entre 6 y 12 en el 30 por ciento. Sólo un 10 por ciento destina entre 12 y 30 euros semanales.
El libro blanco de la Fundación Sociedad y Alcohol contempla también la situación de los profesores, el fenómeno del «botellón». y el comportamiento de los padres así como sus grados de interés respecto a los hábitos de los hijos. La actitud de los progenitores se explica, señaló Gil Robles, por la «ausencia de un modelo pedagógico» que, unido a la actual estructura social con familias monoparentales y carencia de tiempo para atender a los hijos, hace que «los chicos tengan menos normas internas» de comportamiento. En este contexto, «los profesores han pasado de ser sólo educadores a ser casi policías de los jóvenes y se encuentran con la falta de elementos de represión a las conductas», agregó Gil Robles. «Hace años, disciplinariamente era inconcebible que un chaval llegara ebrio a casa a las 6 de la mañana», destaca.
La encuesta hace especial hincapié en las motivaciones que empujan a los adolescentes a la hora de iniciarse en la bebida y que son tres principalmente: deseo de integración en el grupo, búsqueda de referencia en los mayores de su entornos y la búsqueda de la deshinibición para superar la timidez. Otra de las conclusiones del estudio es que las campañas de información tienen un efecto positivo y así un 13 por ciento erradicó el consumo de alcohol tras tener conocimiento del tema, un 53 por ciento modificó su consumo y un 78 por ciento se manifestó más prudentes al beber. A partir de este estudio, realizado sobre una muestra de 5.488 chicos de 12 a 18 años en colegios de toda España, se han obtenido contenidos que se impartirán entre 40.000 alumnos.