Un investigador en el hospital Otto Wagner de Viena "conocido durante la etapa nazi con el nombre de «Am Steinhof»" ha descubierto los restos de cientos de víctimas de la «eutanasia» nazi en una clínica austríaca, según informa en su edición de ayer el diario «Die Presse». En concreto, encontró entre 1.000 y 1.500 diapositivas de partes de cerebro de las víctimas del programa de «eutanasia» nazi que permitieron identificar a unas cien personas, añadió el periódico.
El hallazgo coincide con el momento en que Austria se dispone a rendir homenaje, en una ceremonia que se celebrará mañana, a 772 niños discapacitados físicos y mentales que fueron asesinados en la clínica vienesa «Spiegelgrund» y se han convertido en símbolos de la barbarie nazi. El programa de «eutanasia» lanzado en 1939 por el Tercer Reich, supuso la eliminación de hasta 25.000 personas por sufrir discapacidades físicas o mentales, ser autistas o, simplemente, hijos de padres alcohólicos o delincuentes, por ser considerados inaptos para pertenecer a «la comunidad del pueblo germano. Estos casos fueron enviados a la «Spiegelgrund», donde muchos fueron torturados y asesinados.
El director médico de la «Spiegelgrund», el psiquiatra austríaco Heinrich Gross, que actualmente tiene 86 años, nunca fue juzgado por los asesinatos perpetrados en la clínica, pese a que compareció en dos juicios acusado de complicidad en homicidios.