Los científicos británicos del Instituto Roslin de Edimburgo, que fueron los que clonaron la oveja Dolly, pedirán permiso a las autoridades británicas para que les conceda una licencia que les permita experimentar con embriones humanos. Los científicos solicitarán a las Autoridades de Embriología y Fertilidad Humana que les conceda licencias para poder investigar con células madre para poder encontrar tratamientos para enfermedades como el Parkinson o el Alzeimer, que hasta el momento son incurables.
El jefe de la división de Desarrollo del Instituto Roslin, el profesor Iana Wilmut, dijo que «en los próximos dos meses realizaremos una petición a las Autoridades de Embriología y Fertitidad humana para que nos concedan licencias». Asimismo, apuntó que estas autoridades pueden tardar hasta tres meses para decidir si conceden este permiso. El proceso de clonación está presentando muchos interrogantes, sobre todo después de conocerse que la oveja Dolly padece artritis. El profesor Wilmut señaló que esta condición pudo ser causada por defectos genéticos como consecuencia del proceso de clonación.
La autorización de este tipo de experimentos suscita una virulenta oposición por parte de asociaciones, que denuncian el peligro de que se avance hacia la clonación reproductiva pura y simple. El cultivo y la investigación con células madres es sumamente controvertido en todo el mundo.