El único ex médico vivo del campo de exterminio nazi de Auschwitz (Polonia), Hans Munch, fue considerado ayer culpable de incitación al odio racial y apología de crímenes contra la humanidad por el Tribunal de Apelación de París. La corte no dictó sin embargo ninguna pena contra Munch, de 89 años, debido a su estado mental, ya que, según su defensa, sufre la enfermedad de Alzheimer en fase avanzada.
Las asociaciones de antiguos deportados, no obstante, recibirán un franco simbólico en concepto de daños. En la vista del 19 de septiembre pasado, la Fiscalía del Tribunal de Apelación de París solicitó una pena de prisión exenta de cumplimiento para Munch y consideró que lo importante es que se publicara la condena, para que se supiera que los hechos que se imputaban al ex médico nazi habían sido castigados.
En 1998, Munch, que fue médico de Auschwitz entre 1943 y 1945, defendió, en una entrevista a la emisora francesa «France-Inter», la organización que había en ese campo de exterminio, donde murieron más de un millón de personas. También se mostró partidario del papel desempeñado por los doctores en Auschwitz y del envío de gitanos a la cámara de gas, ya que, en su opinión, eran «miserables» que dejaban a sus hijos morirse de hambre en el campo de concentración. El 20 de junio de 2000, Munch fue absuelto en primera instancia por el Tribunal Correccional de París por razones de senilidad, pero la sentencia fue recurrida.