El presidente del PP de Catalunya, Alberto Fernández Díaz, se desmarcó ayer de sus socios valencianos calificando de «absurdo y reprobable» que el Gobierno de Zaplana pretenda vetar en los libros de texto de literatura la presencia de autores catalanes y mallorquines de «indudable interés literario». «De confirmarse este extremo», señaló el dirigente de los populares catalanes, «habrá que ver cuál es la razón» para la citada decisión, «pero si es sólo porque son catalanes, en el PP de Catalunya no lo podemos compartir».
El proyecto de normativa que el Gobierno de Valencia ha hecho llegar a las editoriales de libros de texto suscitó duras críticas por parte de todos los partidos catalanes. En nombre de CiU, Josep Antoni Duran Lleida lo calificó de «barbaridad» y de «decisión propia del siglo XV», tras lo que pidió al Ejecutivo de Zaplana una «reconsideración» de la decisión.
El portavoz parlamentario del PSC, Joaquim Nadal, apeló a la «inteligencia de los dirigente políticos valencianos» para afirmar su convencimiento de que la iniciativa «no prosperará». Desde ERC, el secretario general de la formación, Josep Lluís Carod-Rovira, apeló a la recién constituida Academia de la Lengua Valenciana para que «legitime su posicionamiento lingüístico» e impida lo que calificó como un «atentado contra la inteligencia». El portavoz parlamentario de IC-V, Joan Boada, atribuyó la decisión de veto a una «ofensiva españolista y ultraconservadora» en contra de Catalunya.
El presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, calificó por su parte de «demagógica y absurda» la polémica y aclaró que el borrador para que las editoriales preparen los libros de texto del próximo curso contiene un listado de autores valencianos, «pero este listado no tiene ningún tipo de exclusión, es sólo el mínimo que considera la Conselleria».