La Asociación para la Lucha Contra las Enfermedades del Riñón (ALCER) anunció ayer que se personará como acusación particular en la causa abierta por un Juzgado de Valencia por la muerte de seis pacientes de hemodiálisis de la Clínica Virgen del Consuelo, mientras que el PSPV-PSOE reclamó la destitución del consejero valenciano de Sanidad. ALCER también anunció que se reunirá hoy con representantes de Baxter, suministradora de los dializadores Althane A-18 que se utilizaban en el servicio de hemodiálisis de la clínica Virgen del Consuelo de Valencia y que fueron retirados la semana pasada.
Por otra parte, los familiares de los pacientes de hemodiálisis fallecidos en Valencia se reunieron anoche para coordinar sus actuaciones, según informaron los abogados de la familia de Carlos Santaisabel, una de las seis personas que murieron entre el 21 y 29 de agosto pasados. El portavoz parlamentario del PSPV-PSOE, Joaquim Puig, pidió la destitución del conseller de Sanidad, Serafín Castellano, por este caso y afirmó que Generalitat «ha puesto en crisis la credibilidad del sistema sanitario».
Por su parte, el PP acusó al PSPV-PSOE de practicar el
«carroñerismo político».
Mientras, el Hospital Clínico de Barcelona insistía ayer en
desvincular las muertes de dos de sus pacientes en hemodiálisis del
uso de los filtros Althane utilizados en el tratamiento de
diálisis, tras haber estudiado en profundidad los dos casos.