La ministra de Educación, Cultura y Deporte, Pilar del Castillo, anunció hoy la nueva fórmula para resolver la parte social y la académica en el Gobierno de las universidades, de forma que sólo intervendrán en tres miembros del órgano social en el académico y viceversa. Además sólo tendrán derecho a voz y no a voto. Estos cambios fueron interpretados por el PSOE como un castigo para los rectores.
Según explicó Del Castillo, con la nueva fórmula de órganos de gobierno, el Ejecutivo trata de «evitar argumentos que pudieran empañar el objetivo fundamental de la reforma», es decir, «garantizar la participación social en la Universidad y una buena incardinación y entronque de la Universidad en su entorno social».
Así pues, el Consejo de Gobierno estará formado por 40 miembros, de los cuales sólo 3 pertenecerán a la parte no académica del Consejo Social en vez de los 10 de un total de 30 que contemplaba el borrador del anteproyecto. Además, su actuación se reduce a participar con voz, pero sin voto. Este nuevo órgano que, por tanto, reducido a una «junta netamente consultiva», estará formado por profesores e investigadores de reconocido prestigio.