Reunidos ayer en Kiruna, en el norte de Suecia, los responsables europeos de Medio Ambiente analizaron la situación después de que Estados Unidos anunciara su retirada del protocolo un día antes de una misión de la 'troika' europea en Washington. El protocolo de Kioto «está vivo todavía» y «ningún país tiene el derecho unilateral de declarar que un acuerdo multilateral está muerto», declaró el ministro sueco, Kjell Larsson.
La Unión Europea «espera que EE UU participe en el proceso de Kioto», pero, de todas maneras, se declaró «preparada a encontrar una solución también sin Estados Unidos». La UE piensa llevar adelante un «diálogo pleno» con Estados Unidos, aunque «explorando las posibilidades alternativas de ratificación» del acuerdo sin Washington, resumió el ministro danés de Medio Ambiente, Sven Auken.
Según su homólogo alemán, Jurgen Trittin, «el objetivo» de la UE es «hacer entrar en vigencia el protocolo en el 2002». El protocolo sería «menos fuerte» sin los estadounidenses, pero «tenemos la responsabilidad de avanzar» y «reunir tantos países como sea posible», explicó Kjell Larsson. «Todavía no está dicha la última palabra», según el ministro holandés de Medio Ambiente, Jan Pronk, que visitó Estados Unidos estos últimos días.
Las conversaciones continuarán con Washington y otros actores importantes del acuerdo de Kioto. Una delegación de la 'troika' europea (Suecia, Bélgica, Comisión europea), encabezada por el ministro sueco, viajará a Washington mañana lunes y el martes para discutir el tema con la administración Bush. El primer objetivo para los europeos es conseguir una aclaración y precisiones sobre la posición de Washington y su alcance. «Recibimos diferentes señales, pero aún no tenemos la formulación definitiva de que abandonan el proceso», declaró Larsson.