Los viajeros se subieron a las cero horas a un autobús que los trasladó hasta el aeropuerto de Barajas (Madrid) en el aparcamiento del Auditorio y Palacio de Congreso de la Región, en Murcia, donde cogerán un vuelo regular de Iberia.
Uno de estos cincuenta ecuatorianos es Paco Guanán, natural de Quito, de 36 años, padre de 3 hijos, que llegó hace 11 meses en busca de trabajo a Lorca, pero que no pudo encontrar un empleo por falta de papeles, por lo que su intención es regresar con los permisos.
Guanán dijo poco antes de coger en una parada de autobús en Lorca el autobús que lo trasladará a Barajas que «aquí sin papeles no eres nadie» y que se va «a ver si consigue regular su situación».
Los ecuatorianos de esta primera remesa de repatriados fueron avisados días atrás de modo telefónico para que lo dispusieran todo para coger el vuelo que sale hoy al mediodía con rumbo a Quito, gracias a un billete de avión que paga el Gobierno español y que les será entregado en el aeropuerto a su llegada, prevista a las 9.00 horas.
Los inmigrantes que se han acogido al retorno voluntario han presentado previamente una oferta nominativa de trabajo, es decir, un empresario ha presentado un precontrato con los nombres y apellidos del trabajador requerido. La duración mínima del contrato es de 6 meses y el ecuatoriano obtendrá un permiso de residencia válido durante un año.
Tras este primer grupo de inmigrantes, saldrán otros sesenta inmigrantes residentes en la región mañana martes, día 20, y otro centenar cogerán un vuelo el miércoles día 21.