Las siamesas marroquíes Fátima y Amina, de 21 meses de edad, que compartían una pelvis, el aparato genitourinario y dos piernas y fueron separadas ayer en el hospital infantil «La Paz», de Madrid, se recuperan en la Unidad de Reanimación y su evolución es favorable.
Tras una larga y compleja intervención que se prolongó durante diecisiete horas, cada una de las niñas se ha quedado con la mitad de los órganos y aparatos que compartían de manera que los especialistas creen que dentro de un tiempo, aunque tengan alteraciones anatómicas, podrán hacer vida dentro de la normalidad e, incluso, tener hijos.
En conferencia de prensa, el jefe del Departamento de Cirugía Pediátrica, Juan Tovar, que coordinó al equipo de cincuenta profesionales sanitarios que realizó las sucesivas operaciones que fueron necesarias para la completa separación de las pequeñas, manifestó que el postoperatorio, previsiblemente, durará entre cuatro y siete semanas «aunque siempre pueden surgir complicaciones», que harían prolongar su estancia en el hospital.
A las niñas, que no compartían ningún órgano vital y estaban unidas por la columna a la altura de las vértebras lumbares, de manera que, a partir de ahí, tenían una sola pelvis y un solo aparato genitourinario, parte del aparato digestivo y del sistema nervioso central compartido y sólo dos piernas para ambas, «se les ha dotado a cada una de la mitad de lo que tenían, en un reparto equilibrado».