Los Quince acordaron ayer, lunes, retirar de la cadena alimentaria el espinazo de los bovinos de más de doce meses y dieron su visto bueno a la puesta en marcha de nuevas medidas para reducir la producción comunitaria. De la columna vertebral o espinazo procede el hueso del conocido «chuletón». El comisario europeo de Protección de los Consumidores, David Byrne, matizó que todavía quedan por determinar las modalidades técnicas del acuerdo político alcanzado por los ministros de Agricultura de la UE sobre ese punto, lo que quiere decir que algunos países podrían quedar excluidos.
En el caso de estados miembros como España y Francia, el responsable comunitario fue claro, al indicar, en respuesta a las preguntas de la prensa, que ambos tendrán que suprimir el espinazo. Los Quince tendrán que estudiar ahora «los detalles» de la prohibición, que podrían comprender, por lo tanto, algunas excepciones, así como las medidas de aplicación. Byrne señaló que habrá que determinar, por ejemplo, si la retirada de la columna se efectúa en los mataderos o en las mismas carnicerías.
Los ministros de Agricultura de la UE no modificaron, por otra parte, la edad de 30 meses a partir de la cual los bovinos deben ser sometidos a los test de detección del mal de las «vacas locas», a pesar de que algún país, como Alemania, ha decidido rebajarla a 24 meses. El comisario europeo de Agricultura, Franz Fischler, señaló que la Comisión Europea presentaría próximamente una propuesta que incluirá medidas como la reducción de la densidad del ganado en las explotaciones, la constitución de cupos individuales para las primas especiales a los bovinos, la suspensión temporal de las primas a las vacas nodrizas y el adelanto de las ayudas a la comercialización de terneros.