La ministra de Sanidad, Celia Villalobos, reconoció ayer que los servicios de urgencias hospitalarias han estado desatendidos y señaló que, «después de quince años de abandono, el Ministerio de Sanidad está negociando con los profesionales de las Urgencias una serie de problemas que tienen en estos servicios».
A preguntas de los periodistas, la ministra declinó hablar sobre el fallecimiento de una persona cuando se encontraba en el área de Urgencias del hospital madrileño «La Paz» el pasado día 19, pero resaltó que el año pasado, el Sistema Nacional de Salud atendió 32 millones de asistencias urgentes y hay 17.000 médicos en este área, lo que demuestra «el magnífico trabajo que está realizando todo el personal de Urgencias». «El sistema funciona, pero hay que resolver una serie de problemas que no están planteando las propias asociaciones de médicos de Urgencias», señaló.
De otra parte, el Gobierno prevé destinar un total de 4.621.842 millones de pesetas al Sistema Nacional de Salud (SNS) en los Presupuestos Generales del Estado para el próximo año, lo que supone un aumento del 6'18 por ciento respecto al presupuesto de 2000, según el Anteproyecto Presupuestario de 2001. Este documento será presentado hoy en el Consejo de Ministros, junto al resto de las cuentas públicas.
Este proyecto presupuestario supone un crecimiento menor que en el año anterior, en el que se dotó al Sistema Nacional de Salud de 4.352.836 millones.