Dos ciudadanos cubanos, que permanecían en la denominada sala tres del aeropuerto de Barajas (habilitada para alojar a los extranjeros inadmitidos y a los peticionarios de asilo) entraron ayer en España después de que las autoridades admitieran a trámite sus solicitudes de asilo político.
Los dos cubanos, que abandonaron el aeropuerto de Barajas sobre las 17.00 horas, prefirieron guardar el anonimato «por posibles represalias contra sus familias» en la isla caribeña, según explicó uno de ellos que comentó que llegó a Madrid el pasado 28 de junio, procedente de La Habana. Esta persona comentó a los periodistas que «dentro de la sala hay todavía 27 cubanos, entre los que se encuentra una niña de 10 años, después de que ayer, lunes, se permitiera la salida de otro».
«Seis de los 27 cubanos, entre ellos los padres de la niña a los que se les ha denegado su solicitud, iniciaron hoy una huelga de hambre y los demás se piensan sumar a esta protesta».