Por el momento se han registrado 64 casos de la «grave enfermedad», de los que el 50 por ciento han muerto, dijo el profesor John Ashton, director regional del Noroeste de Inglaterra del Sistema Nacional de Salud. Se trata de «un tipo particular de infección que se solía encontrar en las trincheras durante la Segunda Guerra Mundial y que produce gangrena y una muerte rápida», dijo Ashton. Sólo en Glasgow (Escocia), se han registrado 15 muertes por la mencionada infección, mientras que en Liverpool y Manchester, murieron otras cinco personas en las últimas dos semanas. En Dublín ocho casos han sido vinculados a la enfermedad.
Los síntomas de la enfermedad consisten en una hinchazón e inflamación en la zona donde se ha inyectado la heroína seguida de la formación de abscesos que en cuestión de días degeneran en una especie de gangrena. Las conclusiones preliminares de expertos en microbiología que han realizado exámenes «postmortem» de los tejidos de las víctimas indican que el causante de la grave infección puede ser un microbio llamado «clostridium», aunque todavía no es definitivo. La infección puede ser combatida con antibióticos pero sólo se obtienen resultados positivos si se le aplica el tratamiento pronto, según el director regional de salud pública.
En España, el Departamento de Sanidad de la Generalitat ha remitido a los hospitales y a los servicios de urgencia una carta en la que se informa de esta infección de origen desconocido «para que sepan que existe una situación de este tipo y estén alerta». En cualquier caso, se remarca que en España no se ha producido ningún caso.