Joao Marto, el único hermano que quedaba de los pastores de Fátima, Francisco y Jacinta, murió el viernes a la edad de 94 años en Aljustre, pequeña localidad próxima a Fátima.
El fallecimiento de Joao Marto adquiere una significación especial al suceder pocos días antes de la llegada del Papa Juan Pablo II a Portugal para la ceremonia de beatificación de sus hermanos en la Basílica de Fátima.
Joao Marto era el único de los siete hermanos de los pastores de Fátima que aún vivía y tenía once años en 1917 cuando se anunciaron las apariciones de la Virgen en el lugar de Cova de Iria.
Los sucesos se produjeron en el año 1917 durante un periodo de cinco meses, entre el 13 de mayo y el 13 de octubre, protagonizados por los hermanos Francisco y Jacinta y la prima de éstos, Lucía, que cuenta actualmente 94 años y vive en régimen de clausura en un convento del Carmelo, en Coimbra.
En numerosas ocasiones, Joao Marto ha rememorado el «miedo» que sintió en su infancia en torno a los acontecimientos extraordinarios de ese año y que «ese miedo le impidió ver las apariciones», según testimonio de su hija Laura Marto.