Sanidad informó ayer de que retira del mercado los fármacos anorexígenos de acción central contra la obesidad, en cumplimiento de una decisión vinculante de la UE, y señala que los pacientes que tomen estos medicamentos deberán hacer una retirada gradual de la medicación bajo supervisión médica.
La Agencia Española del Medicamento, en cumplimiento de la decisión de la Comisión Europea de fecha 9 de marzo de 2000, ha ordenado la revocación de las autorizaciones de comercialización, y consiguiente retirada del mercado, de los medicamentos que contengan los siguientes principios activos: fenfluramina, dexfenfluramina, anfepramona, clobenzorex, fenproporex, fentermina, mazindol, mefenorex, norpseudoefedrina, fenmetrazina, fenbutrazato y propilhexedrina.
Los productos mencionados estaban indicados para el tratamiento a corto plazo de la obesidad. El Comité Europeo de Especialidades Farmaceúticas (CEF) identifica para estas sustancias un potencial riesgo de inducción de reacciones psicóticas, depresiones y convulsiones derivado de su acción estimulante. El reconocimiento de efectos adversos graves agudos y crónicos asociados a su uso y la constatación científica de que la obesidad es un desorden crónico cuyo abordaje terapéutico requiere una estrategia a corto plazo, han llevado a las autoridades sanitarias de todo el mundo a cuestionar la racionalidad de su utilización.
La decisión de la Comisión Europea refrenda el dictamen científico emitido de forma previa por el CEF. En consecuencia, señala Sanidad en un comunicado, deberán ser retiradas del mercado las especialidades farmacéuticas comercializadas en España Delgamer y Finedal, de los laboratorios Marion Merrell; Antiobes Retard, de Novartis Consumer Health, y Tegisec, de Roussel Ibérica.