Los vecinos de El Ejido parecen respaldar al alcalde asegurando que de esta forma se crearán guetos. Unos 8.500 vecinos firmaron un manifiesto que fue entregado en el Ayuntamiento, en apoyo al alcalde Juan Enciso en su decisión de no permitir la instalación de las carpas que Cruz Roja pretende ubicar en el municipio con el fin de albergar provisionalmente a los trabajadores inmigrantes que carecen de vivienda. Los vecinos proponen que en lugar de este tipo de campamentos, que a su juicio se convertirían en «guetos», se subvencione a los agricultores de la comarca para que acondicionen los cortijos, sus fincas, o cedan viviendas a sus trabajadores para que residan en ellas. Por su parte el alcalde de El Ejido, Juan Enciso, aseguró que «la voluntad del pueblo» es no instalar estos campamentos humanitarios, por lo que manifestó que «en un principio se va a prohibir todo esto y buscar otro tipo de soluciones, porque lo que no queremos es que el movimiento vecinal se tenga que movilizar otra vez y que esto pueda traer males mayores».
Enciso manifestó ser «víctima de la sinrazón de las administraciones andaluza y central» y acusó a los alcaldes socialistas de Vícar y La Mojonera de «escurrir el bulto» por decir que en sus municipios no necesitan campamentos provisionales.
Por el momento no se ha avanzado en la instalación de la primera carpa para 150 inmigrantes, ante los problemas que Cruz Roja está encontrando para la obtención del permiso municipal. Esta situación provocó que el consejero de Asuntos Sociales de la Junta de Andalucía, Isaías Pérez Saldaña, pidiera al Defensor del Pueblo para que medie ante la dirección del PP para que obliguen a Enciso a apoyar las medidas acordadas para ayudar a los inmigrantes de esta localidad.
Además, el líder del PSOE, Joaquín Almunia, y el candidato a la presidencia del Gobierno de IU, Francisco Frutos, hicieron la misma petición. «El responsable último de que se vuelvan a producir incidentes no será Enciso, sino Aznar», manifestó Almunia. El presidente de la Asociación de Trabajadores Inmigrantes Marroquíes en España (ATIME), acusó a Enciso de «estar chuleando a todo un Estado».