Las fuertes lluvias, de 30 litros por metro cuadrado en una hora, que en las últimas horas sufrieron localidades del sureste peninsular, se trasladaron a las regiones cantábricas, con lo que ya son 14 las comunidades en situación de alerta debido a la meteorología adversa, según informó Protección Civil. En concreto, las intensas lluvias afectaban al cierre de esta edición a Asturias, Cantabria y las tres provincias vascas, situación que podría continuar durante el resto de la tarde y la próxima madrugada en estas comunidades, además de Navarra, la Rioja y las otras nueve que ya estaban en situación de alerta ayer por mañana.
Se trata de Galicia, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Aragón, Balears, Catalunya, Murcia, Comunidad Valenciana y Andalucía. Aunque no ha habido que lamentar incidentes graves, anoche permanecía cortada la carretera A-330, en el tramo que va de Cullar a Puebla de Manfabrique, en la provincia de Granada, ya que en el kilómetro nueve se ha producido un socavón de cien metros de longitud y una profundidad de uno a dos metros.
Según el alcalde de Cúllar, José Torrente, los daños ocasionados en la agricultura y en casas particulares por las lluvias torrenciales podrían ascender a mil millones de pesetas. Un helicóptero de la Junta de Andalucía permanece en alerta en Guadix ante un posible empeoramiento de la situación.
Sin embargo, la situación comenzaba a ser de calma y el medio centenar de personas que el sábado tuvieron que ser evacuados en Cúllar-Baza "5.000 habitantes" por la inundación de sus viviendas han vuelto a sus domicilios.
En la localidad jienense de Siles, en la Sierra del Segura, la fuerte tormenta de granizo caída ha causado pérdidas de hasta el 50 por ciento de la próxima cosecha de aceituna, con lo que se agrava la situación del olivar en esta localidad, muy afectado por la sequía. En Albacete, los problemas por las intensas lluvias han afectado a Alborea, con cortes de energía eléctrica y daños en la red de agua potable.