El Ministerio de Trabajo propondrá al Pacto de Toledo que se estudie la posibilidad de crear una nueva cotización a un «seguro de dependencia» que daría derecho a recibir automáticamente ciertos servicios sociales, del mismo modo que ahora el seguro de desempleo ofrece una cobertura contra el paro.
Así lo anunció ayer en Santander el director general del Instituto de Migraciones y Servicios Sociales (Imserso), Héctor Maravall, cuyo equipo está trabajando estos meses en el borrador del Plan de Acción para Personas Mayores y en las recomendaciones que el Gobierno elevará a la próxima reunión del Pacto de Toledo.
Héctor Maravall aclaró que el Ministerio de Trabajo no tiene tomada ninguna decisión al respecto ni se pronuncia a favor o en contra de este seguro de dependencia, sino que sólo plantea «la urgencia» de abrir en España «un debate» sobre la conveniencia de implantar aquí un sistema de financiación que ya funciona en Alemania, Francia, Holanda y Austria.
En la actualidad, según datos el Imserso, un millón y medio de mayores "uno de cada cinco españoles con más de 60 años" padecen algún tipo de dependencia y precisan de atención constante o cotidiana, que en la mayor parte de los casos es asumida por las familias, pues el acceso a los servicios sociales está en función de las plazas disponibles y de las listas de espera.
La novedad que introduciría la creación de un seguro de dependencia estribaría en que, por haber cotizado a él, la persona que se vea necesitada de estas atenciones tendría automáticamente derecho a una asistencia domiciliaria, a una estancia en un centro de día o al ingreso en una residencia especializada; servicios que hoy en día ya prestan el Estado, las comunidades autónomas o los ayuntamientos, pero sólo a una pequeña parte de los demandantes.