Un documento de trabajo del Vaticano, preparado en ocasión del sínodo de obispos de Europa, que se celebrará en octubre próximo, lanza un grito de alarma contra el peligro de que el euro constribuya a crear nuevos muros en el viejo continente.
El texto, realizado con la ayuda de los obispos y expertos católicos de toda Europa, será examinado por los prelados del continente que se reunirán en el Vaticano ante la presencia del Papa Juan Pablo II del 1 al 23 de octubre próximos.
El documento denuncia los peligros de que el euro afecte a los países del este de Europa, a la vez que reconoce «la importancia de la unión monetaria para la construcción de Europa».
«La introducción de la moneda única en Europa podría conllevar peligros, porque no sólo puede favorecer la hegemonía financiera y la supremacía de aspectos económico-mercantiles, sino que también puede contribuir a alzar nuevos muros en Europa».