Los siete hijos del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, deben casi un millón de pesetas en multas impagadas al Ayuntamiento de Barcelona, que no las ha podido cobrar porque la familia del presidente ha sido declarada en «paradero desconocido», según informa el «Diari de Girona», que recoge una información publicada previamente por «El Triangle».
De los siete hijos de Pujol, Pere y Josep son los que más sanciones impagadas acumulan y los que han sido declarados en paradero desconocido en más ocasiones. Así, Pere Pujol debe 400.000 pesetas, mientras que su hermano Josep ha sido declarado ilocalizable en diez ocasiones a pesar de que es el manager de una empresa consultora perfectamente identificada.
Por su parte, Oriol Pujol, número 10 en la lista de CiU por Barcelona, debe 230.000 pesetas en multas y fue declarado en paradero desconocido por última vez el 26 de junio del año pasado, tal y como recoge el «Diari de Girona». Oriol Pujol es director general de Afers Interdepartamentals, adscrito a la conselleria de Presidencia de la Generalitat.
El resto de los hermanos acumulan deudas de medio millón por multas no pagadas en los tres últimos años y, como los anteriores, también están en paradero desconocido. En total, los siete hermanos Pujol Ferrussola deben un millón en multas y, a pesar de su presencia en la vida pública o de sus cargos en las empresas en las que trabajan, no consta que hayan recibido ninguna notificación oficial de las multas.