Los españoles tienden cada vez más a comer fuera de casa. Así se deduce del estudio 'Alimentación en España', presentado ayer por el presidente de la empresa nacional Mercasa, Miguel Ramírez, que arrojó el dato de que el gasto alimentario realizado por los establecimientos de hostelería y restauración el pasado año representó un 26% del gasto total en alimentación, lo que representa cuatro puntos más en apenas cinco años, los mismos que perdió el gasto para consumo doméstico.
El trasvase de cuatro puntos del consumo doméstico al sector de la hostelería y restauración responde, según explicó Ramírez, a la incorporación de la mujer a la vida laboral, así como a la mejor situación económica, que permite a los consumidores españoles destinar un mayor gasto a los capítulos de esparcimiento y ocio. El estudio señala que el gasto total en la compra de alimentos ascendió en España a 8'6 billones en 1998, un 3'4% más que en 1988.
El gasto medio per capita para consumo en hogares fue de 156.000 pesetas. Además, Miguel Ramírez señaló que la dieta básica de los españoles responde, en términos generales, a los patrones de la dieta mediterránea, como lo demuestra que los mayores aumentos de consumo en 1998 se registraran en frutas y hortalizas, productos pesqueros y aceite de oliva.