La mayoría de las muertes hospitalarias por VIH se dan en pacientes «que ha llegado muy tarde al sistema sanitario», según el jefe de la Unidad de VIH del Hospital General Universitario Valencia, Enrique Ortega, quien indicó además que el futuro de la lucha contra esta enfermedad «es esperanzador».
Enrique Ortega, que se encuentra en Madrid para participar en unas jornadas sobre nuevas estrategias en la lucha contra el sida, afirmó que algunos enfermos «ingresan con un estado tan deteriorado que es imposible restituir su sistema inmunológico», e indicó que la mayoría de las muertes hospitalarias por esta enfermedad «se dan en los pacientes de SIDA que han llegado muy tarde al sistema sanitario».
Este especialista se mostró muy optimista en relación al futuro en la lucha contra el VIH, y lo calificó de «esperanzador», gracias en parte a la utilización de los fármacos antirretrovirales.
Estos fármacos, explicó, actúan sobre las dos principales enzimas causantes del sida: la trascriptasa inversa, «que es una especie de fotocopiadora del ácido nucleico» y la proteasa, «que es la encargada del empaquetado final del virus».
No obstante, y aunque reiteró que los avances farmacológicos son singularmente importantes, Ortega dijo a Efe que «aún no podemos decir que el sida se ha convertido en una enfermedad crónica».