El ministro de Educación y Cultura, Mariano Rajoy, abogó ayer por el «diálogo y la negociación» entre la Generalitat y las distribuidoras de cine para solventar la polémica por el decreto del cine en catalán.
Mariano Rajoy se mostró partidario ayer de continuar en la línea de diálogo establecida entre la Generalitat y las distribuidoras cinematográficas y recordó que «la imposición nunca lleva a ninguna parte». Señaló, también, que todas las partes en conflicto pueden fijar sus prioridades sin necesidad de establecer sanciones.
Por su parte, el presidente de la Generalitat de Catalunya, Jordi Pujol, salió al paso ayer de las críticas que ha recibido el decreto de doblaje de cine en catalán afirmando que su Gobierno no quiere introducir elementos de tensión en la negociación para la entrada en vigor del texto y que, por este motivo, están estudiando cuál es la mejor aplicación.
El presidente catalán aseguró que desde algunos sectores se quiere que «todo lo relacionado con el catalán sea de peaje».