El juez instructor del Tribunal Vaticano, Gianluigi Marrone, ordenó ayer el archivo del caso sobre los asesinatos del comandante de la Guardia Suiza Alois Estermann, y de su esposa, la venezolana Gladys Meza, por el cabo Cedric Tornay, el 4 de mayo de 1998 en el Vaticano.
La petición de archivo confirma la versión de los hechos difundida por el Vaticano pocas horas después de los asesinatos, según la cual el cabo Tornay, de 28 años, asesinó a Esterman, de 44, y a su esposa Gladys y después se suicidó. Con el archivo, el Vaticano da por concluido uno de los casos más llamativos de su historia.
El 4 de mayo de 1998, poco después de ser nombrado comandante de la Guardia Suiza, Alois Estermann y su esposa fueron hallados muertos a tiros en una sala de su apartamento de la Ciudad del Vaticano. En el mismo lugar apareció el cadáver del cabo.
El portavoz de la sala de prensa de la Santa Sede, Joaquín Navarro Valls, afirmó posteriormente que los asesinatos fueron cometidos por el joven Tornay en un ataque de locura, porque no soportaba que el comandante no le hubiese concedido una medalla.