El aeropuerto de Helsinki dispone de un Mitsubishi Outlander PHEV que se encarga de orientar a los pilotos para que guíen a los aviones a las posiciones designadas en estas instalaciones.
Las características propias del Outlander PHEV lo convierten en la elección ideal para un uso exigente y, en la mayor parte de las ocasiones, a muy baja temperatura. En el aeropuerto, los recorridos son cortos, aunque también es preciso fuertes aceleraciones, y aquí es donde el gran par del vehículo proporcionado por el motor eléctrico supone una ventaja. Otros activos importantes del vehículo son la tracción a las cuatro ruedas, el bajo consumo, su buena visibilidad y el silencio que ofrece la tecnología híbrida.