El Ajuntament de Pollença ha convocado un pleno extraordinario y urgente para este jueves a las 17:00 horas con el objetivo de aprobar una moratoria de un año en la concesión de licencias de obra en la zona urbana de Formentor. Esta medida busca frenar la posibilidad de nuevas urbanizaciones en este icónico enclave del municipio, que ha sido objeto de controversia en los últimos años.
La decisión, promovida por el equipo de gobierno liderado por el alcalde, Martí March, responde a la necesidad de actualizar el planeamiento urbanístico vigente, que data de 1990. «El plan actual ya no se adapta a la situación actual ni da respuesta a la problemática existente», explicó March en declaraciones previas al pleno. Durante el periodo de moratoria, el consistorio elaborará y aprobará -al menos de manera provisional- un nuevo planeamiento que regule de forma clara y definitiva las cuestiones urbanísticas en Formentor.
La medida llega tras años de polémica en torno a las obras de demolición y reconstrucción del histórico hotel Formentor, proyecto que ha estado marcado por múltiples irregularidades. Además, la moratoria frenará temporalmente el proyecto de la promotora del hotel que contemplaba la construcción de nueve viviendas de superlujo junto al complejo hotelero.
Formentor, conocida por su alto valor paisajístico y medioambiental, ha sido objeto de debates públicos debido al impacto de las actuaciones urbanísticas en la zona. Con esta moratoria, el Ajuntament pretende garantizar un desarrollo sostenible y adecuado a las necesidades actuales del municipio, preservando al mismo tiempo esta zona.
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