La reciente polémica entre el Ajuntament de Búger y el rector de la parroquia por la negativa de este último a ceder la iglesia para celebrar el reparto de regalos de Reyes se resolvió el domingo por la tarde con la celebración de este acto frente a la Casa Consistorial.
Los Reyes Magos llegaron a caballo y se sentaron frente a la fachada del Ajuntament para recibir al público asistente que se congregó en la plaza. Un remolque transportaba los regalos, que se fueron entregando a los niños y niñas.
Cabe recordar que el rector Pere Gerard Bestard decidió no autorizar el uso de la iglesia parroquial para el reparto de estos regalos, organizado por el Ajuntament. El rector justificó su negativa por la falta de comunicación previa y planteó una serie de críticas hacia la gestión de actividades por parte del Consistorio.
Bestard manifestó a Ultima Hora que no consideraba adecuado que el reparto se realizara en el interior de la iglesia, algo que se hizo el año pasado de forma excepcional por culpa del mal tiempo, porque a la mañana siguiente se celebraba la misa de Reyes y «tiene que estar todo bien. La parroquia es un lugar sagrado que merece respeto, no es un lugar para poner globos». En cambio, ayer por la tarde se llevó a cabo la representación teatral de la OCB, que obtuvo una autorización excepcional.
Por su parte, el alcalde Pere Torrens lamentó la situación y defendió que «siempre ha existido una relación de colaboración y respeto mutuo entre ambas instituciones».