Si alguien desconocía la riqueza y diversidad gastronómica que ofrece sa Pobla, este domingo ha podido saborearla e impregnarse de sus aromas con motivo de la Fira de l’Arròs Pobler. Biel Serra ‘pepis’ ha vuelto a cocinar un gran caldero con el plato estrella de la feria, un arròs pobler que llevaba 50 kilos de arroz cultivado en sa Pobla, costilla de cerdo, pollo, sepia, pato y yemas de huevo, además de una combinación «secreta» de especias. El resultado ha sido un arroz caldoso espectacular del que se han repartido unas 400 degustaciones a un precio simbólico de 2 euros, para colaborar con la restauración del rosetón de la parroquia.
El alcalde, Biel Ferragut, y las autoridades locales e invitadas han paseado entre los puestos de la plaza entre los que había embutidos, quesos, productos de horno y vermut, aceites y plantas, pero un único puesto de venta de arroz cultivado en sa Pobla. Y es que junto con loscacahuetes, son dos productos gourmet de la cocina poblera y la producción está vendida incluso antes de ser cosechada. Ambos productos locales se vendían a 6 euros el kilo y la demanda ha sido constante.
Ya no quedan muchas plantaciones de arroz en sa Pobla, al tratarse de un cereal que necesita mucho riego, por eso sobre la plaza se ha reproducido una para que el público pueda ver cómo es un arrozal. Junto a ella, un pequeño Pasquali como los tractores que se usaban antaño para algunos trabajos agrícolas ha hecho las funciones de photocall para niños y mayores.
Alrededor de la plaza y en las calles y espacios céntricos se han distribuido los artesanos y todo tipo de puestos de feria y atracciones, mientras los bares y restaurantes llenaban todas sus mesas con una gran afluencia de público empujado por el sol que ha brillado durante toda la jornada.