Unas 50 personas entre las cuales había gente sin hogar, entidades sociales, voluntarios que trabajan con este colectivo y ciudadanos sensibilizados con esta problemática, salieron a la calle para reclamar más derechos y soluciones a la falta de vivienda en Mallorca.
Dentro de la campaña «Nadie Sin Hogar - Caminemos juntos» impulsada por Cáritas y con el apoyo de las entidades sociales de iglesia (Sojorn, La Sapiència y Justicia y Paz) unas 50 personas además de 40 jóvenes del Club d’Esplai de Binissalem recorrieron el domingo los cuatro kilómetros que separan Lloseta y Binissalem bajo el lema «Nadie Sin Hogar, Digamos Basta».
La marcha reivindicativa se enmarca en una serie de actividades organizadas «para recordar que la situación de las personas que no disponen de una vivienda digna empeora, y que a muchas de ellas, disponer de un sueldo mensual y un trabajo fijo no les garantiza poder acceder a una vivienda adecuada», señala Cáritas.
Cifras récord de 'sin techo'
El pasado año, estas entidades atendieron a 815 personas una cifra límite para estas organizaciones, que ven desbordados sus centros de acogida al no producirse la habitual rotación de usuarios porque no tienen acceso a una vivienda aunque trabajen.