Familias y alumnos del IES Manacor que llegan al centro desde Porreres han denunciado el «colapso y la saturación» en que se encuentra el servicio público de autobuses, especialmente en las horas de entrada y salida de los colegios e institutos. Una situación que ya denunciaron y que, pese al anuncio de refuerzos, sigue sin resolverse. Esta situación, aunque afecta a otras localidades vecinas, es especialmente grave para los alumnos porrerencs.
«El problema es que, desde siempre, los estudiantes de Porreres hemos tenido pocas combinaciones de bus», explica una de las afectadas. En este sentido, asegura que «el único bus que pasa a las 14.15 horas, a la salida del instituto, es el 417, que tiene parada en Vilafranca y Porreres. Al ir demasiado lleno, siempre hay unas 15 o 20 personas de Porreres que nos quedamos tiradas y debemos esperar dos horas y media hasta que pasa el próximo autobús».
Los afectados matizan también que «a las 14.30 h pasa otro autobús, el 401, con parada en Vilafranca y Montuïri pero no en Porreres, por lo que dar prioridad en el anterior a los alumnos de Porreres evitaría en parte estas interminables esperas». Sin embargo, reconocen que no es la solución definitiva puesto que «se necesitan más buses o con más capacidad en las horas puntas de los centros educativos, ya que la gente se pega para entrar», explican.
Según los mismos alumnos los días con más problemas son los jueves y los viernes, «días en los que coincidimos más cursos a la salida y todo el mundo quiere coger el mismo autobús».
Las familias lamentan también que los refuerzos nunca llegan «ya que al final, nunca están disponibles».