Las personas con desarrollo sexual diferente o diverso (DSS) viven situaciones de exclusión social, problemas en sus relaciones afectivas y sexuales, malas experiencias médicas, ansiedad, sentimientos de culpa, vergüenza o miedo, y muchas veces hasta esconden su condición por el estigma que conlleva. Con la intención de visibilizar esta condición y normalizarla, el Govern de les Illes Balears impulsó la creación de un protocolo de atención integral a personas intersexuales. Este jueves, el Hospital de Manacor ha acogido la primera presentación de este Plan en el ámbito sanitario.
La jefa de servicio de Coordinació y Antenicón a la Diversitat de Gènere, Lena Castells y la antropóloga, enfermera y investigadora, Núria Gregori-Flor, participantes en la redacción del plan, han sido las encargadas de desgranar el documento que «ahora debemos poner en práctica». Ambas coincidieron en señalar que durante años «se ha tratado a las personas intersexuales como enfermas cuando no lo son». Entre las prácticas que se recogen en el protocolo están garantizar el derecho a la información, la prohibición de cirugías en personas recién nacidas o el no ocultar ni silenciar las situaciones de intersexualidad.
Al acto también han asistido la consellera d’Afers Socials, Catalina Cirer y la consellera de Salut, Manuela García. Ambas coincidieron en destacar la relevancia de este documento para «un mundo más justo y abierto a la diversidad». Así, Cirer aseguró que «el desconocimiento crea estigma. Un protocolo de estas características lo reduce».
Se estima que entre el 0,5 % y el 1, 7% de la población mundial nace con características intersexuales. En las Balears, con una población de casi 1,2 millones de habitantes, se calcula que hay hasta 20.400 personas conviviendo silenciosamente con una intesexualidad.
El Hospital de Manacor es el primero en disponer de un Comité de Salut i Gènere que impulsa iniciativas de formación en género para el personal sanitario.