El pleno extraordinario celebrado en Pollença aprobó una moción presentada por Tots-PI, PP y Unió Mollera Pollencina para instar al Parlament a que modifique el decreto ley de medidas de simplificación administrativa y que permita que las viviendas que estén fuera de ordenación en suelo rústico y se legalicen puedan seguir manteniendo la actividad de alquiler vacacional y que solo afecte a las casas que nunca han tenido la licencia turística.
La propuesta contó con el apoyo del PSIB-PSOE y el voto en contra de Més. El alcalde Martí March añadió que «el Ajuntament de Pollença debe instar al Govern y al Consell a aprobar, de forma dialogada y consensuada, una normativa que regule el alquiler turístico vacacional, el número de plazas y los criterios de calidad y legalidad».
Por su parte, el portavoz de Tots-PI, Tomeu Cifre, resaltó que «hay que recordar que estas plazas no son nuevas, ya están en funcionamiento. Siempre hemos defendido la lucha contra el alquiler vacacional ilegal y que se haga una normativa específica que resuelva este problema que afecta de pleno a Pollença».