Con el objetivo de descongestionar el núcleo costero de sa Ràpita, especialmente durante la temporada alta, y mejorar la movilidad de la zona, el Ajuntament de Campos ha impulsado una reforma circulatoria en la localidad que se espera empiece a estar operativa a finales de este mismo mes de junio. Así lo confirmó la regidora encargada del área, Maria Obrador. «Este proyecto se empezó a fraguar antes de la pandemia y es una actuación necesaria para reordenar el tráfico de la zona correctamente, por lo que hemos empezado a colocar la señalización para tenerla a punto antes de julio, cuando empiezan a llegar más gente a sa Ràpita».
La actuación consiste en reconvertir la mayoría de las calles del núcleo en vías de un único sentido. La primera línea y otras vías muy anchas o con conexión a otros núcleos se mantendrán con dos sentidos. De esta manera se pretende evitar retenciones y a la vez no se perderán zonas de estacionamiento. «Calles estrechas como las de sa Ràpita, con dos sentidos y aparcamiento en las dos partes, era inviable y, además, peligroso», apuntó Obrador. Esta semana se ha iniciado la colocación de la señalización para materializar esta acción.
En este sentido el Ajuntament licitó la contratación del suministro y instalación de hasta 267 señales, 253 de ellas de dirección prohibida. Cabe recordar que durante los meses de verano la población de sa Ràpita (de unas 900 personas) puede llegar a triplicarse «con los problemas de movilidad que eso implica».