La reforma del paseo marítimo de Magaluf estará lista la próxima temporada turística. Así al menos lo aseguró este viernes el Ajuntament de Calvià a las asociaciones y entidades de la zona al presentar la primera fase de este plan de mejora y embellecimiento de Magaluf.
Las obras empezarán el próximo mes de octubre, al finalizar la época estival, y terminarán en un periodo de siete meses, la mitad de lo previsto en un primer momento (14 meses). El proyecto consiste en la remodelación del paseo construido en 1990, y que entonces unió por primera vez toda la primera línea de la playa de Magaluf. Cabe recordar que el Consistorio que lidera Juan Antonio Amengual acordó cambiar el nombre del conocido paseo marítimo por el del empresario Gabriel Escarrer, fundador del grupo Meliá Hotels.
El objetivo de la remodelación actual, explican desde el Ajuntament, pasa por mejorar y actualizar una zona turística madura que se halla inmersa en un proceso de renovación, desde el ámbito público y privado, y que desde hace años los diferentes consistorios trabajan para mejorar su imagen turística.
Los trabajos de primera fase tendrán un coste de 3,9 millones de euros que serán financiados por los fondos europeos y la Agencia de Estrategia Turística de Balears. En total, se reformarán 650 metros del paseo. El plan inicial de reforma en dos años se ha reducido «gracias al compromiso de la empresa adjudicataria de las obras, Amer e Hijos, a tan sólo siete meses, entre octubre de este año y mayo de 2025», recalcan desde el propio Ayuntamientos con el objetivo de minimizar el impacto que pueda tener las obras en los establecimientos de la zona.
La remodelación se iniciará en la esquina del Nikki Beach hasta la conocida plaza del Pirates. Se reordenará y embellecerá el paseo y se renovará toda su infraestructura y servicios, como el alumbrado, las redes de residuales, pluviales (con un depósito de recogida para riego) y agua potable, la red de riego y el mobiliario urbano. Además, también se creará una red de aprovechamiento de aguas pluviales de escorrentía para riego. Así mismo, el proyecto incluye la reubicación parcial de las palmeras existentes y la plantación de nuevas palmeras para crear zonas de ‘pequeños oasis', en lugar de la disposición alineada actual. También se dispondrán dunas artificiales en la arena de la playa, sobre las que se plantarán arbustos mediterráneos de ribera.