La plataforma Indignats Ma-10 cargó ayer contra la Dirección General de Tráfico (DGT), después de que se publicara que esta administración empezó el viernes a instalar cámaras en la carretera de la Serra.
A pesar de que la medida tiene el objetivo de combatir las carreras ilegales, tal como piden los vecinos, éstos aseguran que este no es el acuerdo al que se llegó. «Han decidido instalar cámaras sin sonómetro ni radar como se nos prometió hace dos meses en una reunión mantenida en el Consell. Ahora solo grabarán las imágenes y ya», lamentaron desde la plataforma vecinal.
El hecho es que uno de los principales temas que llevan años denunciando, además del peligro que supone la conducción temeraria, es el ruido que hacen las motos. Por ello, desde la plataforma se le da mucha importancia a que se mida el ruido: «Revientan los sonómetros a 125 decibelios, cuando el máximo permitido son 90», aseguraron.
Esta no es la única decisión de la DGT que ha enfadado a los Indignats, también las diversas declaraciones que se han hecho desde esta administración sobre la velocidad a la que circulan las motos y los coches. «Hicieron y anunciaron un informe sosteniendo que en la Ma-10 no se cometía ninguna ilegalidad y que los vehículos circulaban a 35 kilómetros por hora», explicaron los vecinos.
Dimisión
Por ello, piden la «inmediata dimisión» de la directora de la DGT, Francisca Ramis: «Hacen ver que actúan ante una situación demandada por la ciudadanía generando gasto público pero sin resolver ni combatir el problema», sentenciaron.