Las excavaciones del Pla de Fosses i Memòria Democràtica en el cementerio de Son Coletes pusieron de relieve que el campo de santo de Manacor fue uno de los puntos más crueles de la represión franquista con al menos 132 víctimas localizadas. Dignificar este espacio es una de las tareas que tiene previstas el Ajuntament de Manacor con el objetivo de dignificar el espacio. Durante las exhumaciones el alcalde, Miquel Oliver, ya anunció que estudiaban crear un espacio para la memoria de las víctimas que ahora se pretende traducir en un proyecto donde señalizarán las fosas donde se localizaron los restos de los represaliados.
Una de las opciones que se plantea el Ajuntament es realizar un cambio de textura en el pavimento existente, donde se marcarán los lugares exactos en los cuales se localizaron las rasas con los restos de los asesinados. Además, también se instalarán placas con los nombres de las personas identificadas durante las campañas de excavación así como el número de víctimas que todavía no se han podido identificar.
«El objetivo del proyecto es que quede integrado dentro del cementerio de manera permanente, ya que lamentablemente no se puede desligar este espacio de su significado a nivel histórico», señala el alcalde Oliver mientras enfatiza que Son Coletes «debe ser un espacio de memoria» que permita no olvidar los hechos que ocurrieron en Manacor y sirva también de homenaje a las víctimas.
Hace tiempo que el Ajuntament de Manacor trabaja en este proyecto que ahora toma más relive justo la semana en que Vox ha presentado en el Parlament una proposición para derogar la Ley de Memoria y Reconocimiento Democrático de Balears y que se aprobará gracias a los votos del PP. Ante esta situación, que eliminará también la Memoria Histórica en la educación, el Ajuntament también ha anunciado que la Guía Educativa de Manacor, que cada año elabora el departamento de educación, ofrecerá actividades pedagógicas a los centros educativos del municipio sobre esta cuestión.
También la de derogación de la ley de Memoria fue criticada ayer en el acto de homenaje a las víctimas de la represión que cada año organiza el Comité de Son Coletes en el cementerio de la ciudad y que congregó numeroso público bajo un sol de justicia. «Es más necesario que nunca decir claro que la democracia la eliminaron los que defendían una idea de la política y de la convivencia sectaria, egoísta y, en muchas ocasiones, violenta», señaló Anna de la Salud, encargada de leer el manifiesto del Comité.
El acto también hizo una mención especial a la incasable activista feminista Antònia Matamalas fallecida el pasado mes de enero, así como al socialista Sebastià Riera. El investigador Antoni Tugores, también tomó la palabra donde recordó que de las 17 mujeres desaparecidas en Mallorca, 15 murieron en Son Coletes. Entre ellas, las cinco enfermeras que llegaron con las tropas de Bayo. Tugores defendió ante los presentes por qué debe llamarse sanitarias a las cinco mujeres y no milicianas, «ya que murieron por ser sanitarias y estar aisladas en el hospital de Sang», explicó.
La música y la voz de Montse Mozo, Maria Àngela Riera y Maite Rama animaron el acto que finalizó con la ofrenda floral porque, un año más, fueron muchos los ciudadanos regresaron a Son Coletes servando la memoria de los que allí murieron.