Este domingo se celebró en Sóller la tercera edición de la ‘Fira i mercat de la carn i de l'embotit', un evento que nació tras la pandemia con la principal intención de ayudar a los comercios locales del sector cárnico a recuperarse de las pérdidas que supuso la limitación de foguerons y torrades durante varios años. La concejalía de Promoción Económica también impulsó este mercadillo que se celebra poco antes de Semana Santa, como un nuevo intento de promocionar el mercado municipal.
Animación
Más de un millar de personas, sin contar otros muchos paseantes y turistas que también se acercaron a la Plaça del Mercat, asistieron al evento, que tuvo un carácter festivo y disfrutó de un tiempo totalmente primaveral. Un total de 16 comercios expusieron y vendieron ayer sus productos cárnicos, derivados y complementos. Los visitantes podían adquirir productos para llevar o para asar en la plaza y consumirlos allí mismo, como muchos hicieron, desde un simple cantó de pa amb sobrasada o botifarrons, hasta lomo, ternera, tocino fresco o pinchos morunos, entre otros productos.
Otros asistentes al evento aprovecharon para hacer la compra o los encargos de carne para elaborar las panades o para las comidas pascuales. También se pudo ver una exposición sobre la historia de las industrias locales de embutidos y una visita guiada a algunas de las fábricas actuales y antiguas. El ambiente musical de la jornada estuvo a cargo de los Xeremiers de Sóller y de las agrupaciones Aires Sollerics y Ánima Acústica.