El Ajuntament d'Inca celebró ayer mediodía, en el Claustre de Sant Domingo, el ya tradicional Memorial de l'Oblit. Este año el acto, se dedicó a la figura de Miquel Beltrán Planas, alcalde republicano de la capital del Raiguer entre 1933 y 1936. Fue una personalidad muy destacada en el municipio tanto en el ámbito social, como político e histórico.
Una cincuentena de personas acudieron al homenaje, entre ellas uno de sus nietos quién se emocionó mucho por el acto: «Tenía nueve años cuando mi abuelo murió y gracias a ello he podido saber cómo era su personalidad. Estoy muy orgulloso», relató el hombre.
Esta iniciativa se enmarca dentro del ciclo ‘Inca té memòria', que se lleva a cabo durante el mes de febrero con el fin de recuperar y difundir la memoria histórica de la ciudad. «Estamos aquí para hacer memoria y hablar en voz alta y con orgullo de aquellas personas que, con mucha valentía, trabajaban para dejar un mejor mundo para los suyos y para toda su sociedad y que lo pagaron con su vida de una manera u otra. Es hora de hablar en voz alta y hacer justicia y reparar, a través de la memoria», señaló la concejala de Memoria Democrática, Alice Weber.
En cuanto a la figura del ex alcalde de Inca, Weber destacó que «Miquel Beltrán fue un hombre activo y de espíritu crítico, fundador y miembro de diversas agrupaciones locales que lucharon por una sociedad más justa, democrática y libre y por tal motivo, a partir de septiembre de 1936 fue represaliado, perseguido, encarcelado y vigilado».
Ofrenda floral
Durante el acto, se ha realizado la tradicional ofrenda floral en recuerdo de las víctimas inqueras de la Guerra Civil, con el acompañamiento musical de la agrupación Cofre Antic que ha interpretado El Cant dels Ocells. Este homenaje, como cada año, ha contado con la participación del Ajuntament de Inca, el colectivo Memoria de Mallorca, el colectivo Recerca y la Fundación Darder Mascaró, entre otras asociaciones.
Cabe destacar que dentro del ciclo ‘Inca té memòria', el Ajuntament ha organizado también una exposición dedicada a la vida de Beltrán. La muestra, instalada en la Sala de Vidre del Claustre de Sant Domingo, se inauguró ayer, justo antes de la celebración del Memorial de l'Oblit.