La torre de defensa de Cala en Basset construida en 1583 y Bien de Interés Cultural incluido en el Catàleg de Patrimoni del Ajuntament d'Andratx sigue en estado de degradación continua. El espacio está repleto de grafitis tanto dentro del monumento como también fuera, en una caseta anexa donde se encuentra un mural grafitero desde hace cinco meses.
A pesar de las continuas denuncias, tanto de forma oficial como a través de los medios de comunicación, los vecinos de la zona lamentan que no ha habido ningún paso a favor para la conservación de este BIC. En este sentido, recuerdan también que a las pinturas vandálicas hay que añadir el mal estado en el que se encuentra la terraza de la torre lo que «supone un gran peligro de caída».
El vandalismo en este BIC del siglo XVI es constante. De hecho, se han detectado muchos tipos de actos incívicos a lo largo de estos últimos años. «Son muchos los que miccionan en el interior del recinto, otros se dedican a tirar hacia abajo las piedras que desprenden del muro que rodea la terraza y otros elementos de la misma», explican.
Cabe recordar también que en los años del confinamiento una persona se precipitó voluntariamente accediendo a la parte superior de la torre de defensa. Una de las soluciones que se planteó desde hace años desde asociaciones protectoras del Patrimonio era poner una puerta o cerramiento para que no se pueda acceder al interior, lo que evitaría el vandalismo y el peligro que supone estar en la azotea de este bien de interés cultural.