El Ajuntament de Consell ha criticado que la Conselleria de Salut no haya dado inicio a lo que debía ser el proyecto estrella de esta legislatura: la construcción de una nueva unidad básica de salud que sustituya al actual dispensario de Son Bernadet, pues la población se ha duplicado en los últimos años y se ha quedado obsoleta.
El alcalde de Consell, Andreu Isern (PSOE) ha lamentado que «la anterior legislatura se dejó realizado el proyecto y las obras llevan ocho meses adjudicadas después de dos licitaciones fallidas; pero la empresa no puede empezar los trabajos porque el Govern todavía no ha designado a un director de obras».
El proyecto de la futura unidad básica de salud, que estará ubicada en un solar cercano al parque infantil de son Cosmè, fue adjudicado a la constructora Vilor por 3,7 millones de euros, tras revisar el presupuesto inicial debido al incremento de precio de los materiales de construcción.
El anterior ejecutivo socialista lo declaró proyecto de interés autonómico en 2021 para agilizar los trámites e incluso la expresidenta Francina Armengol visitó los terrenos, pero «ahora nos han comunicado que esta condición ha caducado y tememos que el nuevo Govern dé marcha atrás al proyecto», explica Isern. El Ajuntament de Consell solicitará al Govern que declare de nuevo proyecto de interés autonómico la construcción de la futura unidad de salud del municipio.
El nuevo edificio será de una sola planta dividida en tres áreas: en una de ella estarán los accesos, la zona administrativa y diversas zonas de servicios e instalaciones; en otra estarán las consultas de pediatría y en la tercera, la más extensa, habrá una sala de curas y extracciones, el resto de consultas y los lavabos.