Medio centenar de personas acudió este domingo a la ofrenda floral en el cementerio de Alaró, que se hace cada primer domingo de diciembre en el municipio para recordar las víctimas del fascismo. Aunque se trata de un acto que se celebra desde hace más de diecisiete años en Alaró, la edición actual fue especial. Se aprovechó para hacer una mención especial a Rafel Fiol, hijo de uno de los represaliados (Miquel Fiol Martí), que falleció el pasado lunes y que cada año acudía a este memorial.
Cabe destacar que el nieto de la víctima sí que estuvo presente en el acto, además de multitud de familiares de otras víctimas y también representantes políticos. En ese sentido, el alcalde, Llorenç Perelló (PP); la secretaria general de los Socialistas de Alaró, Aina Munar, y la portavoz de MÉS per Alaró, Aina Sastre, acudieron del acto.
Se trata de un memorial organizado por Alaró per a la Recuperació de la Memòria Històrica, que invitaron a la periodista de esta publicación, Elena Ballestero, y al compositor y guitarrista Joan Carles Palou de Germans Tanner.
La introducción corrió a cargo de uno de los miembros de la entidad organizadora, quién destacó los riesgos del avance de la extrema derecha en toda España y de las consecuencias del pacto de gobierno estatal. Además, aprovechó para tildar de «xenófoba» la intervención del regidor de Vox de Marratxí, Manuel V. Martínez, quién rechazó declarar hijo ilustre a Josep Massot i Muntaner por «catalanista».
Tras la introducción, se le dio la palabra a Elena Ballestero, quién puso en valor que en el acto había representantes de distintos partidos políticos, incluso del PP. En ese sentido, la periodista recordó que «no tenemos que ceder ante el típico argumento de ‘divide y vencerás', se tiene que reconocer a cualquier iniciativa buena sea quien sea que lo organice».
Ballestero destacó que la importancia de mantener la responsabilidad individual a la hora de mantener la Memoria histórica: «Los padres, abuelos y tíos también tenemos esa función de contar a los pequeños los crímenes que han acontecido durante la humanidad». Además, la periodista advirtió del peligro de perder la memoria en plena democracia: «No tendría ningún sentido que eso sucediera, con la cantidad de familiares que han venido hoy aquí».