Algaida celebró el pasado jueves un pleno extraordinario en el que se aprobó la suspensión de cuatro disposiciones adicionales del nuevo Decreto Ley de Vivienda impulsado desde el Govern. Así, el municipio no permitirá por ahora el crecimiento en altura, la transformación de locales comerciales en vivienda, la división de viviendas, ni la transformación de zonas de servicios en zonas residenciales «hasta que se haya podido estudiar con detenimiento la conveniencia o no de aplicar definitivamente, de manera global, o parcial, estas disposiciones».
La medida salió adelante con los votos a favor del partido de gobierno (PSOE) y del grupo en la oposición de Més. El Partido Popular y Vox, por su parte, también en la oposición, votaron en contra.
En la proposición se matiza que la aplicación inmediata de estas disposiciones «podría suponer una afectación negativa en el municipio, del tejido comercial o del paisaje urbano, entre otros».
La alcaldesa de la localidad, Marga Fullana, destacó que «queremos estudiar con detenimiento como podría afectar al municipio y también consultarlo a los vecinos ya que el tema urbanístico nos afecta a todos». Més también valoró la medida como «satisfactoria».