El LIFE Adapt Cala Millor es un pionero proyecto que se empezó a implementar en enero de este año en Cala Millor y permitirá aumentar la resiliencia de la bahía ante la amenaza del cambio climático. Es el único proyecto piloto de este índole que se realiza en una playa urbana.
Cala Millor podría llegar a perder entre el 33 y el 66% de su playa seca en poco más de 70 años. Unas cifras que han podido conocerse gracias a más de veinte años de una monitorización sistemática y sostenida del oleaje y la morfología de esta playa del levante mallorquín. Estos datos junto a las características de la playa, han convertido esta bahía en el escenario idóneo para llevar a cabo esta iniciativa.
Este proyecto tiene como objetivo principal seleccionar las medidas de adaptación al cambio climático fundamentadas en la ciencia más oportunas para esta playa. Para ello se buscarán soluciones consensuadas entre todos los actores que participan de esta incitativa basadas en la propia naturaleza. Aunque también será necesaria una adaptación física de la ciudad para complementar y hacer eficaces al resto de medidas «más verdes». Así, se propondrá una transformación a largo plazo del sistema de playas y del área urbana para aumentar la resiliencia de ésta.
El trabajo, que se desarrollará durante cinco años, empezó en enero de este 2023 y se pretende que los resultados finales puedan ser extrapolados a otras playas del mediterráneo con características similares, por lo que, «este proyecto puede convertir a Cala Millor en un referente a escala nacional, europea y también mundial», explicó durante la presentación del proyecto el Director General de Cambio Climático, Diego Viu.
El proyecto permitirá prever escenarios futuros lo que evitaría los efectos físicos, ambientales y socioeconómicos previstos para este tramo de la costa de la Isla.
La iniciativa cuenta con una inversión final de 2.294.047 euros, de los cuales 1.376.424 serán cofinanciados por el programa LIFE de la Unión Europea.