El Ajuntament de Llubí aprobó inicialmente en el último pleno la modificación puntual de las normas subsidiarias para construir un nuevo punto verde en el municipio. Actualmente, el planeamiento urbanístico no cuenta con un espacio destinado a la recogida de residuos y, por lo tanto, «no se está dando cumplimiento a lo que prevé la legislación en materia de residuos no peligrosos de Mallorca», según explicó la alcaldesa Magdalena Perelló. Por ello, el Ajuntament propone la delimitación y ordenación de una parcela que se destinará a este uso.
El ámbito donde se quieren ubicar las nuevas instalaciones, de 1.925,5 metros cuadrados y se sitúa a 500 metros del centro del pueblo, justo en la rotonda que conecta la carretera Ma-3440 con el camí de es Dau. Se trata de un solar de titularidad pública que está ubicado al lado de una urbanización que no se ha llegado a ejecutar nunca, dado que no dispone de los mínimos servicios urbanísticos. El futuro punto verde, que tiene un presupuesto de casi 400.000 euros subvencionado por el Consell de Mallorca, «es muy necesario, ya que el actual está ubicado en suelo rústico, mientras que la normativa recomienda que esté en suelo urbano», destacó la alcaldesa.
Los técnicos municipales barajaron otros solares antes de proponer este. En concreto, dos parcelas que están en la misma zona aunque quedaron descartadas ya que al ser de titularidad privada se tendrían que expropiar, lo que aumentaría el coste significativamente.