La empresa pública Tragsa entregará esta semana al Consell de Mallorca la recepción de las obras del primero de los cinco proyectos de consolidación que en la actualidad están en marcha en el edificio del Sindicat de Felanitx. Las tareas, encargadas por las institución insular, son obras de urgencia para frenar el patente deterioro que sufre el antiguo Celler Cooperatiu de vino y que se complementan a los trabajos que ya se iniciaron con el cierre perimetral y el desbrozamiento de la zona.
La intervención que ahora se entrega se ha centrado en la zona del edificio donde empezaba todo el proceso de producción de vino, en los espacios donde se descargaba la uva. Las obras han consistido en interrumpir el deterioro estructural, además de evitar filtraciones de agua por la cubierta.
Desde el Consell destacan que todas las actuaciones no han alterado ningún elemento existente en cuanto a su geometría ni a su ubicación, con una fidelidad absoluta para guardar exactamente la misma forma y disposición tal y como se construyó en su momento.
Así, en la zona conocida como marquesina de acceso, se ha podido recuperar la misma estructura de entramado de perfiles de acero en T y se han reparado algunas vigas, además de cubrir todos los elementos para protegerlos de la lluvia. Por su parte, en la conocida como Sala de Tolva, con una superficie de 257 metros cuadrados, se han reparado «todos los elementos estructurales tanto horizontales como verticales, dejándolos idénticos al estado original», señalan en el informe de la institución insular. Al igual que en el anterior espacio, también se ha cubierto con chapa grecada para protegerlo de las lluvias.
Cabe señalar que el año pasado estos dos espacios, la zona de tolvas y la marquesina, que ya fueron apuntalados para evitar su derrumbe. Este es uno de los cinco proyectos que el Consell de Mallorca encargó a la empresa pública Tragsa licitados el año pasado. Las cinco actuaciones tienen un presupuesto de poco más de un millón de euros. Son, como ya indicó el Consell en su momento, actuaciones de emergencia, para frenar el deterioro del edificio que fue adquirido por la institución insular en 2019. Desde entonces se han realizado actuaciones puntuales ya que el antiguo celler se encontraba en muy mal estado de conservación.
Tras las elecciones del 28 de mayo, serán ahora los nuevos responsables del Consell los que tengan que determinar la continuación del proyecto tanto de consolidación como para dar un nuevo uso al Sindicat.