Las hierbas y todos sus derivados llenaron ayer por la tarde la céntrica plaza Major de Selva durante la celebración de la XXIII Fira de ses Herbes.
La entrada de la Murta junto al pasacalles de los collidors, de los Dimonis y los Xeremiers de Selva dieron el pistoletazo de salido a los actos y a la apertura del mercadillo que se montó en la misma plaza.
Uno de los principales atractivos de esta feria es poder contemplar el proceso de destilación que se hace en una alambique montado para la ocasión, mientras que tiene lugar el baile de l'Estol.
Cientos de personas llenaron ayer la plaza durante la feria nocturna, que no terminó hasta bien entrada la noche con el Foc de l'Estol de ses Herbes y la batucada Gorimba.
Aunque la feria se celebró ayer por la tarde, los actos en Selva empezaron el pasado jueves con un taller de decoración de fachadas. El viernes se celebró una noche de tapas en la plaza Major.