Los colectivos del Firó de Sóller (moros, pagesos y pageses) han advertido por escrito al Ajuntament que si Delegación del Gobierno no autoriza finalmente el uso habitual de las armas de avancarga (trabucos y espingardas) se desentenderán de la organización del simulacro y lo que finalmente se haga el próximo lunes para celebrar los hechos de 1561 «dependerá exclusivamente del Ajuntament». De esta manera, dan a entender que si Intervención de Armas no modifica el informe que limita el uso de estas réplicas, su participación será «pasiva». «Nos sentaremos en la plaza y nada más», han asegurado algunos de los participantes.
Aunque el Ajuntament ha manifestado su apoyo incondicional a los colectivos, el lunes estos prepararon un comunicado en el que manifiestan que «después de más de seis meses de reuniones y negociaciones, las exigencias que nos han llegado con poco más de una semana de antelación son inviables». Creen que los informes desfavorables «desvirtúan nuestra fiesta y son prohibitivos sin plantear alternativas», lo que consideran un «agravio comparativo» con otras fiestas similares.
Este martes por la mañana el alcalde, Carlos Simarro, mantuvo una reunión telemática con responsables de la Delegación del Gobierno, aunque no se pudo llegar a ninguna conclusión más allá de lo especificado en el informe de la Guardia Civil. En todo caso, al no haber autorización antes del jueves, las armas alquiladas que tenían que llegar de Valencia no pueden viajar legalmente y ya no llegarían a tiempo para la fiesta, por lo que la celebración del simulacro podría verse gravemente afectada.