El instituto Can Peu Blanc de sa Pobla ha suspendido este viernes las clases a raíz de los actos vandálicos que provocaron en el centro un numeroso grupo de jóvenes en la madrugada del jueves al viernes. Aulas con el mobiliario por los suelos, tierra y jabón por los pasillos, pizarras descolgadas, puertas rotas a patadas, huevos lanzados en el patio y toda una serie de incidencias han sido algunas de los desperfectos causados.
El claustro del centro de Secundaria ha emitido un comunicado en el que condenan «rotundamente las acciones vandálicas de los Quintos ‘05 dentro y fuera del centro escolar» y el Ajuntament, tras reunirse con una representación de los jóvenes y no aclarar quienes han sido los autores materiales, ha decidido suspender la fiesta de los Quintos de este sábado en Can Cirera Prim.
Según explica el director del instituto, Roberto Ayuso, «a las dos de la madrugada sonó la alarma y la bedel descubrió que unos cincuenta jóvenes (alumnos, exalumnos y ajenos al centro) habían accedido al edificio». A lo largo de una hora «un grupo se dedicó a provocar destrozos y pintadas, mientras que otros intentaban reparar o mitigar los daños sin lograrlo».
En la mañana del viernes el alcalde Llorenç Gelabert ha visitado el instituto y una brigada de veinte operarios ha restaurado el orden, junto al personal de limpieza del centro y los profesores, para que el lunes puedan reanudarse las clases. Las de este viernes se han suspendido al no poder emprenderlas con normalidad.
El claustro se muestra «entristecido y decepcionado ante estos actos, realizados por alumnos y exalumnos que han formado parte de nuestra comunidad educativa». Aseguran que «han tenido consecuencias muy graves» y denuncian «la sensación de impunidad que tienen los autores», aunque «se tomarán las medidas para reparar monetariamente y moralmente las consecuencias derivadas».